El Ejército sirio inició el pasado domingo la batalla del Sur de Siria, donde los grupos armados opositores habían realizado avances en los últimos meses.

El Ejército sirio inició el pasado domingo la batalla del Sur de Siria, donde los grupos armados opositores habían realizado avances en los últimos meses. Según diversos testigos, una multitud sin precedentes de militares sirios y de sus aliados están acudiendo al frente sur.

Las tropas gubernamentales han lanzado ataques en varios frentes situados sobre el triángulo que une la provincia de Damasco con las de Deraa y Quneitra. En algunas horas, los militares sirios se apoderaron de Tal Mari, una de las tres colinas estratégicas situadas entre la provincia sur de Damasco y las localidades del norte de Quneitra.

Las milicias que ocupaban esta posición, incluyendo los Batallones Al Furqan del Ejército Sirio Libre (ESL) han sufrido duras pérdidas en el ataque y han perdido al jefe de su unidad de ingeniería, Omar Ayyub al Masri.

Si el Ejército sirio gana esta batalla, explica el periódico Al Akhbar, esto debería permitirle consolidar sus posiciones en el frente sur, tanto en Quneitra como en las provincia de Deraa, y lanzar otras batallas para expulsar a los grupos armados de estas regiones estratégicas antes de que ellas se conviertan en una amenaza peligrosa.

En Deraa, las milicias tratan, por su lado, de impedir el avance del Ejército sirio hacia sus posiciones en las localidades de Anjel, Yabab, Yadiyat, Kaitat, Kaniyat y Kafar Shams. En esta última, un jefe militar del Batallón Al Furqan, Shehadé Ibrahim al Bashir fue abatido en los combates contra las tropas gubernamentales.