Los rebeldes pro-rusos infligieron el miércoles un nuevo revés militar a las autoridades de Kiev, obligando al Ejército ucraniano a abandonar, después de encarnizados combates, Debaltseve.

Los rebeldes pro-rusos infligieron el miércoles un nuevo revés militar a las autoridades de Kiev, obligando al Ejército ucraniano a abandonar, después de encarnizados combates, Debaltseve, un punto estratégico para el control del este del país después de diez meses de insurrección separatista.

Los occidentales pueden culpar a los separatistas y acusarles de torpedear el proceso de paz y violar el cese el fuego decretado el sábado. Sin embargo, al tomar Debaltseve, ellos se han limitado a dar el último toque a la reconquista del territorio tomado por los militares ucranianos durante el verano.

La zona conquistada por los rebeldes es relativamente homogénea y une los territorios separatistas de las repúblicas de Donetsk y Lugansk. La cuestión que se plantea ahora es si los rebeldes detendrán la operación allí o buscarán expandir su control a otras zonas de ambas repúblicas.

El presidente ucraniano, Petro Porochenko, tomó la palabra desde el aeropuerto de Kiev para anunciar el abandono de Debaltseve antes de dirigirse a la zona de guerra para encontrarse con los soldados que habían tenido que abandonar la localidad.

“Esta mañana, las fuerzas armadas ucranianas y la guardia nacional han finalizado la operación de evacuación planificada y organizada por nuestras unidades militares en Debaltseve”, dijo el jefe de Estado en una alocución a la nación.

Poco antes, periodistas de AFP vieron decenas de tanques, blindados ligeros y vehículos militares ucranianos dirigiéndose desde Debaltseve hacia Artemivsk, una ciudad situada a unos 35 kms. Estos vehículos transportaban soldados visiblemente agotados algunos de los cuales se dirigieron corriendo hacia las tiendas de alimentación.

Por su parte, el Ministerio de Defensa de la República Popular de Donetsk afirmó que Debaltseve está totalmente bajo el dominio de sus milicias. “Debaltseve está bajo el control de la RPD”, señaló el ministerio en un comunicado. Éste añade que unos 30 soldados ucranianos se habían rendido a la milicia.

La ciudad de Debaltseve se había convertido en el epicentro de la lucha en el este de Ucrania después de la reanudación del conflicto el 17 de enero. Esta ciudad está estratégicamente situada en la carretera que une Donetsk y Lugansk y es también el lugar donde se encuentra una importante intersección ferroviaria.