El servicio de inteligencia israelí expresó su creencia de que “Irán en este estadio no está realizando las actividades necesarias para producir armas nucleares”.
Menos de un mes después de que el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, mostara un dibujo que aludía a una bomba nuclear iraní en un discurso en la ONU en octubre de 2012, el servicio de inteligencia israelí expresó su creencia de que “Irán en este estadio no está realizando las actividades necesarias para producir armas nucleares”.
En un informe de investigación colocado en el sitio web de The Guardian, se señala que el Mossad envió un cable de alto secreto a Sudáfrica el 22 de octubre de ese año en el que hacía una evaluación sobre el trabajo nuclear de Irán que contradecía el cuadro expuesto por Netanyahu.
Manifestando que Irán “no ha comenzado el trabajo necesario para construir armas nucleares, el cable del Mossad señalaba que los científicos de la República Islámica están trabajando para cerrar los huecos en áreas que parecen legítimas, tales como el enriquecimiento de uranio para los reactores”.
“Aunque Irán ha acumulado suficiente uranio enriquecido al 5% para fabricar varias bombas y ha enriquecido algo más de uranio hasta el 20%, no parece estar dispuesto a enriquecerlo a niveles superiores”, señalaba el cable del Mossad.
Esta revelación se produce en un momento en el que las tensiones entre la entidad sionista y su más firme aliado, EEUU, se han incrementado dramáticamente poco antes del planeado discurso de Netanyahu al Congreso de EEUU el próximo 3 de Marzo.
Según el periódico británico, “la Casa Blanca teme que la retórica inflamatoria del líder israelí pueda dañar las sensibles negociaciones entre Irán y el grupo 5+1 sobre el programa nuclear de Irán”.
“El informe del Mossad sobre el programa nuclear de Irán en 2012 contrasta con el tono alarmista impuesto por Netanyahu, que lleva años presentando el programa de nuclear de Irán como una amenaza existencial para Israel y un enorme riesgo para la seguridad mundial”.
En su discurso de 2012 ante la ONU, el primer ministro israelí enseñó en su mano un dibujo en forma de bomba y pintó una raya roja simbolizando aquello que la entidad sionista “no podía tolerar”.
Irán alcanzó un acuerdo interino con las potencias mundiales en noviembre de 2013 por medio del cual aceptó convertir o diluir su stock de uranio enriquecido al 20%. En la actualidad, el país y el Grupo 5+1 esperan obtener un acuerdo marco definitivo para resolver el tema nuclear de Irán antes de finales de marzo y un acuerdo final detallado para el 30 de Junio.