El Ejército iraquí y las milicias populares lanzaron este lunes una operación de envergadura que busca aniquilar a los takfiris del EI en diferentes regiones de la provincia de Salahuddin.
El Ejército iraquí y las milicias populares lanzaron este lunes una operación de envergadura que busca aniquilar a los takfiris del EI en diferentes regiones de la provincia de Salahuddin, en el norte de Bagdad.
Unos 30.000 miembros del Ejército y las milicias populares iraquíes, apoyados por la aviación, participan en esta ofensiva.
Según el corresponsal de Al Manar en Iraq, esta operación, que durará varios días, se extiende en una superficie de 8.000 km2.
El destacó la participación de varias tribus de esta región en la ofensiva al lado del Ejército, y más concretamente la tribu de Yubur.
Por su parte, la televisión iraquí, citada por la cadena iraní en lengua árabe Al Alam, indicó que las fuerzas iraquíes lograron este lunes romper la primera línea de defensa del EI en la región de Banat al Hassan, al este de Samarra.
El Ejército y las milicias populares progresan a partir de cinco frentes hacia Dur, Alam y Tikrit.
Según un coronel del Ejército iraquí, citado por AFP, las fuerzas iraquíes “avanzan por rutas secundarias a fin de impedir la huida de los milicianos del EI.
El Ejército iraquí cortó también la carretera que une Bagdad y Kirkuk hasta nueva orden antes del inicio de la operación.
Proteger a los civiles
Por su parte, el primer ministro iraquí ha ordenado al Ejército que proteja a la población civil para impedir que sufra daños durante el transcurso de esta operación militar.
“La prioridad que hemos fijado al Ejército y a las fuerzas que lo ayudan es la de preservar la seguridad de los civiles”, indicó Haider al Abadi, citado por AFP.
El primer ministro, que se expresó así en Samarra, la otra gran ciudad de la provincia de Salahuddin, llamó a través de las redes sociales, a “proteger a los civiles y sus propiedades con el mayor esmero”.
Abadi pidió también a los habitantes que se levanten contra el EI en las zonas que éste ocupa.
“Llamo a todos aquellos que han sido engañados y que han cometido errores en el pasado a deponer las armas hoy. Ésta podría ser su última oportunidad”, dijo Abadi, sugiriendo así también la posibilidad de una amnistía para algunos terroristas.
El EI se apoderó en junio de 2014 de grandes porciones de territorio del oeste y norte de Iraq, donde impuso su ley y multiplicó sus atrocidades.