Irán, que juega un papel importante en varios conflictos en Oriente Medio, no cederá su influencia regional a cambio de concesiones de las grandes potencias en el tema nuclear, estiman los expertos.

Irán, que juega un papel importante en varios conflictos en Oriente Medio, no cederá su influencia regional a cambio de concesiones de las grandes potencias en el tema nuclear, estiman los expertos.

El general Qassem Soleimani, uno de los comandantes de los Guardianes de la Revolución Islámica, se felicitó en febrero por la creciente influencia de su país en la región.

Teherán apoya a Iraq frente al grupo terrorista EI suministrando armas, material y consejeros militares. El papel de Irán y de las milicias shiíes en la ofensiva actual para tomar la ciudad de Tikrit (norte) de manos del EI podría ser “positivo”, señaló recientemente el general estadounidense Martin Dempsey.

Irán es también el principal aliado regional del gobierno sirio frente a los grupos terroristas y apoya políticamente a la población de Bahrein frente a la dinastía de los Al Jalifa. En Yemen, Irán respalda a los huthis, que han tomado el control de la capital, Sanaa.

Irán aporta también una ayuda financiera y militar a los grupos palestinos, especialmente en la Franja de Gaza, como Hamas y el Yihad Islámico.

También apoya al partido Hezbolá en el Líbano y la resistencia de ese país contra la ocupación israelí.

Mientras que el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, advirtió el martes que Irán estaba “tragándose varias naciones”, Washington afirmó que continuará “oponiéndose con determinación” a todo intento de Irán de extender su influencia, incluso en caso de un acuerdo nuclear.

“La influencia de Irán es moral”, aseguró el miércoles la portavoz de la diplomacia iraní, Marzieh Afjam, añadiendo que Irán “es una potencia real e importante en la región y quiere utilizar su peso para asegurar la paz, la seguridad, la estabilidad y el progreso”.

Ali Vaez, especialista sobre Irán del International Crisis Group indica la ausencia de un vínculo entre el dossier nuclear y los temas regionales. Las grandes potencias e Irán “negocian seriamente sobre el primer punto y sólo han intercambiado puntos de vista sobre el segundo”, explicó. Sin embargo, él cree que el levantamiento de las sanciones favorecerá a Irán y su papel regional.

El analista político iraní, Amir Mohebian, asegura que “de alguna forma, Teherán no aceptará negociar sobre su influencia como potencia regional”. “La única potencia que combate hoy en día al EI sobre el terreno no es la coalición internacional, dirigida por EEUU, sino Irán”, afirmó, subrayando que “ningún responsable iraní está autorizado a negociar sobre la influencia regional de Irán”.

Mohebian denunció la falta de estrategia de EEUU en Siria señalando que Washington “quería el derrocamiento del presidente Bashar al Assad sin reflexionar sobre lo que ocurriría a continuación”. “Esta estrategia ha reforzado a los grupos extremistas como el Frente al Nusra y el EI”, añadió.

“Imaginad que la política estadounidense hubiera llevado a estos extremistas a Damasco”, afirmó. “¿Por qué queréis que Irán cambie su política dado que este país ha tenido razón desde el principio?”.

En lo que respecta a Yemen, “Irán apoya un movimiento popular mientras que EEUU respalda a un presidente que ha perdido su poder y legitimidad”, señaló. En ese país los rebeldes controlan el poder en Sanaa desde enero mientras que el presidente Abd Rabbo Mansur, elegido en 2012 y apoyado por los países occidentales y las monarquías del Golfo, ha huido a Adén.

Es igualmente impensable que Teherán corte su ayuda a los grupos palestinos que luchan contra Israel, señala Muhammad Sedghian, analista del Centro Árabe de Estudios Iraníes, con sede en Teherán.

“El apoyo de Irán a los movimientos de resistencia en la región, ya sea en Palestina o en el Líbano, es una cuestión estratégica de la política de Irán y no se verá influenciado por circunstancias políticas o económicas”.