Rusia dispone de una carta en Europa: la de los partidos formados por compatriotas que viven en el extranjero, señaló el viernes el periódico RBC Daily.
Rusia dispone de una carta en Europa: la de los partidos formados por compatriotas que viven en el extranjero, señaló el viernes el periódico RBC Daily.
A título de ejemplo, el periódico cita el partido Einheit (Unidad), que viene de hacer su aparición en Alemania. Es posible que pronto aparezcan grupos políticos similares en Italia y Francia.
El presidente del partido, Dimitri Rempel, ha manifestado que Einheit fue creado en la primavera de 2013 y que en 2014 contaba con más de 4.000 miembros en toda Alemania. Sus representantes trabajan en varios comités pro-inmigración de varios consejos municipales.
El senador ruso Igor Morozov explica que una tal iniciativa política podrìa tener lugar también en Francia e Italia. Dimitri Rempel dijo haber recibido iniciativas para crear una filial del partido en otros países por lo que es posible ahora para su partido político el cooperar en el espacio europeo común y participar en las legislativas europeas.
Para los inmigrantes rusos y otros países de la ex Unión Soviética en Alemania no fue fácil unirse a un proyecto político, ya que ellos tradicionalmente mantenían sus distancias con la política, señala Vladislav Belov, director adjunto del Instituto de Europa afiliado a la Academia de Ciencias de Rusia. Él dijo que, para convertirse en un partido activo, Unidad debe presentarse a las elecciones. En total, Alemania cuenta con casi 60 movimientos y partidos políticos activos.
“Nuestros militantes eran relativamente a políticos, pero los acontecimientos en Ucrania les hicieron reaccionar. Ellos participan ahora activamente en las manifestaciones, recogen ayuda humanitaria para el Donbass y expresan activamente su opinión en las redes sociales. Buscamos beneficiarnos de ello”, explicó Rempel.
El programa del partido se centra en cuestiones de inmigración y sociales. El partido está a favor de simplificar los procedimientos de reagrupación familiar, anular la educación sexual en la escuela primaria, establecer la enseñanza obligatoria acerca de la historia de los colonos alemanes, etc. Según estimaciones del partido, más de 15 millones de alemanes tienen un pasado vinculado a la inmigración.
Desde el inicio del conflicto ucraniano, los medios occidentales se han referido al apoyo acordado por las autoridades rusas a las fuerzas conservadoras europeas, como el Frente Nacional de Marine Le Pen, el Fidesz del primer ministro húngaro Viktor Orban, el partido búlgaro Ataka, el Partido de la Libertad de Austria y otros.