El equipo de negociadores iraníes fue recibido de forma calurosa el viernes por la mañana a su retorno a Teherán, al día siguiente del anuncio en Lausana (Suiza) de un histórico acuerdo nuclear.

El equipo de negociadores iraníes fue recibido de forma calurosa el viernes por la mañana a su retorno a Teherán, al día siguiente del anuncio en Lausana (Suiza) de un acuerdo histórico con las grandes potencias sobre el dossier nuclear.

Después de haber celebrado durante la noche este acuerdo, que constituye una victoria para Irán, decenas de jóvenes organizaron un comité de bienvenida para el ministro de Exteriores, Mohammad Yavad Zarif, y su equipo de expertos y de directores políticos, según la agencia de prensa ISNA.

Ellos acompañaron al cortejo aplaudiendo al equipo de negociadores iraníes mientras que Zarif sonreía y los saludaba, según las imágenes difundidas por la televisión estatal.

En un breve comentario en el Aeropuerto de Mehrabad, Zarif agradeció al Líder Supremo, Ayatolá Sayyed Ali Jamenei, que era el que tenía la última decisión en el tema nuclear, por “su notable apoyo al equipo de negociadores”, indicó la agencia IRNA.

“Vive Zarif, Viva Araghchi”, gritaban los manifestantes en referencia al jefe de la diplomacia y uno de sus adjuntos, Abbas Araghchi.

Otros manifestantes expresaron también en las celebraciones de la calle o en las redes sociales sus felicitaciones al presidente Hassan Rohani y a Ali Akbar Salehi, jefe de la Organización Iraní de Energía Atómica (OIEA), que estuvo encargado de las cuestiones técnicas durante las negociaciones, según ISNA.

Los negociadores iraníes y los de las grandes potencias lograron el jueves entenderse sobre los puntos clave del dossier abriendo así el camino hacia un acuerdo final, después de un maratón de negociaciones, que se prolongaron durante 18 meses entre Ginebra, Viena, Nueva York y Lausana.

En Teherán, el acuerdo fue recibido fue recibido el jueves por la noche con escenas de júbilo.

Una parte de la gran avenida Vali Asr, que atraviesa la capital iraní, quedó bloqueada por una larga fila de vehículos, cuyos conductores hacían sonar su claxon. Los peatones cantaban y bailaban en la calle haciendo la V de la victoria y agitando pañuelos blancos.

Según el acuerdo, Irán tendrá el derecho a llevar a cabo actividades nucleares pacíficas y verá el completo levantamiento de las sanciones estadounidenses y occidentales.