El líder de la facción Frente de Lucha Palestina, Jaled Abdul Mayid, denunció aquí las masacres cometidas por bandas del grupo terrorista EI en el campamento de refugiados de Yarmuk.
El líder de la facción Frente de Lucha Palestina, Jaled Abdul Mayid, denunció aquí las masacres cometidas por bandas del grupo terrorista EI en el campamento de refugiados de Yarmuk, destacan hoy medios locales.
“Los terroristas del EI y del Frente al Nusra secuestraron a decenas de vecinos del campamento, cortaron las cabezas de cinco personas y mataron a tiros a otros dos”, subrayó Abdul Mayid.
Según el dirigente, la presencia de los extremistas armados provocó un desplazamiento masivo de residentes del campamento, pero la alianza de varias milicias palestinas logró hacer retroceder a los terroristas en algunas zonas del interior del asentamiento.
Destacó que se produjeron violentos enfrentamientos cerca de la mezquita de Salahuddin, y en las inmediaciones de Lubieh, Safed y Haifa, provocándole significativas pérdidas a las bandas del EI y Al Nusra.
Denunció también que los armados antigubernamentales están dinamitando edificios con explosivos, en un intento de reforzar el control sobre el campamento y dificultar el acceso de unidades leales al gobierno sirio.
El pasado 2 de abril, bandas del EI y del Frente al Nusra ocuparon violentamente el campamento de refugiados palestinos de Yarmuk, ubicado a solo cinco kilómetros al sur de esta capital.
Según cifras de la agencia de ayuda de la ONU para refugiados palestinos, (Umrwa), actualmente hay cerca de 18,000 refugiados dentro del campamento sin acceso a agua potable, alimentos o electricidad, a consecuencia del conflicto bélico y la acción terrorista de las bandas de Al Nusra y el EI.
Esta no es la primera vez que el campamento se convierte en escenario de combates, pues en diciembre de 2012 estuvo bajo el control de grupos extremistas armados.
En esa ocasión, los constantes ataques del Frente al Nusra contra los convoyes humanitarios, provocaron que decenas de refugiados murieran de hambre, ante la imposibilidad de acceso a la ayuda ofrecida por el gobierno sirio y la Media Luna Roja.
Establecido en las inmediaciones de Damasco en 1957 para acoger a los refugiados palestinos que huyeron de sus tierras de la ocupación israelí, el campamento de refugiados de Yarmuk llegó a acoger a 160 mil personas, que disfrutaban de los mismos derechos que los ciudadanos sirios, a diferencia de lo que sucedía en los campos de refugiados en Jordania y Líbano.