A pesar de años de presiones de EEUU y amenazas de sanciones a Pakistán, el gaseoducto Irán-Pakistán será finalmente construido por la compañía china CNPC, según los informes.
A pesar de años de presiones de EEUU y amenazas de sanciones a Pakistán, el gaseoducto Irán-Pakistán será finalmente construido por la compañía china CNPC, según los informes.
Este proyecto ha sido presentado como una forma de que Pakistán resuelva décadas de graves problemas de energía que han llevado a cortes en los suministros en las principales ciudades. El gas iraní suministrará la cantidad de energía necesaria para completar las necesidades pakistaníes y evitar los cortes.
EEUU amenazó en los pasados años con imponer fuertes sanciones contra Pakistán por hacer negocios con Irán.
La implicación de una compañía china en el proyecto parece ser el resultado del reciente acuerdo nuclear con Irán y del planeado levantamiento de sanciones.
Como miembro permanente del Consejo de Seguridad y por su fortaleza económica, China está en una posición más ventajosa para rechazar las amenazas de EEUU y más ahora teniendo en cuenta los recientes progresos diplomáticos en el campo nuclear.
El acuerdo será firmado durante una visita del presidente chino, Xi Jinping, a Pakistán este mes, señalaron responsables pakistaníes. China se comprometerá también a realizar otras inversiones en Pakistán en un momento en el que pocos otros países están dispuestos a invertir dinero en este país azotado por el terrorismo.
“Vamos a construirlo”, dijo el ministro de Petróleo de Pakistán, Shahid Khaqan Abbasi, al Wall Street Journal. “El proceso ya ha comenzado”.
La construcción del gaseoducto tendrá también implicaciones políticas y ayudará a promover los vínculos entre Irán y Pakistán, que habían sido dañados por la influencia de Arabia Saudí y EEUU en este último país.
Aunque Irán ha construido ya los 900 kms de gaseoducto en su territorio Pakistán parece no disponer de recursos y ha pedido a China que construya su parte, estimada entre unos 1.800 y 2.000 millones de dólares. El 85% de esa cantidad será pagado con un préstamo chino y el resto lo será por Pakistán, señala el WSJ.
La compañía china que trabajará en el proyecto es la Oficina de Oleoductos de China, una empresa subsidiaria del gigante Corporación Nacional del Petróleo de China. Ella planea construir una sección de 700 kms del gaseoducto desde el puerto de Gwadar, al oeste de Pakistán, hasta Nawabshah, en la provincia sureña de Sindh, donde el gaseoducto será conectado a la red nacional. La parte que va desde Gwadar hasta la frontera iraní será construida por Pakistán.
China ha sido durante décadas aliada de Pakistán frente a su común rival India. Sin embargo, existe también una dimensión económica para la propia China en el proyecto, ya que existen planes para alargar el gaseoducto hasta el suroeste de ese país en el futuro.