Miles de yemeníes se reunieron el lunes en las calles de la capital Sanaa para condenar la agresión saudí.

Miles de yemeníes se reunieron el lunes en las calles de la capital Sanaa para condenar la agresión saudí. Los manifestantes cantaron eslóganes contra Arabia Saudí, EEUU y los terroristas del EI y Al Qaida.

Los manifestantes señalaron que ellos permanecen firmes y determinados frente a la agresión norteamericano-saudí.

La manifestación estuvo organizada por el Consejo Revolucionario Supremo y fue el segundo evento de este tipo que se produce en menos de dos semanas.

Los participantes en la protesta advirtieron a Arabia Saudí y sus aliados que su sangrienta agresión contra Yemen no quedará sin respuesta y que los yemeníes responderán decisivamente al asalto.

“Estamos llegando. Cavaremos vuestras tumbas y os borraremos del mapa”, cantaron los manifestantes.

Uno de los oradores llamó a Arabia Saudí el “reino del EI” en referencia al apoyo del régimen saudí al grupo terrorista que opera en varios países de Oriente Medio.

“Es un régimen que trata de desestabilizar el mundo islámico a través de sus instrumentos de inteligencia, incluyendo el EI y otros grupos terroristas”, afirmó.

Otro orador que representaba a la población tribal yemení también advirtió a los saudíes acerca de las consecuencias de la continuada agresión contra Yemen y señaló que Riad sufrirá pronto la derrota.

Durante la manifestación, los participantes cantaron eslóganes en favor de la libertad y manifestaron su determinación a luchar contra la opresión e intervención extranjera y contra el terrorismo.

Los manifestantes condenaron también el bloqueo saudí contra la empobrecida nación árabe y dijeron que la negativa de Riad de dejar entrar alimentos y medicinas en el país es otro signo de la brutalidad e irracionalidad del régimen saudí.

Ellos afirmaron también que los gobernantes saudíes eran totalmente anti-religiosos ya que disfrutan asesinando a gente inocente, algo que está prohibido por los principios islámicos. Un orador señaló que los aviones saudíes han bombardeado mezquitas y casas en el tiempo de oración y esto muestra que el reino wahabí no siente ningún respeto por la religión ni las enseñanzas religiosas.

Una declaración aprobada al final de la manifestación muestra el apoyo al movimiento Ansarulá, que en la actualidad controla Sana y otras grandes provincias. Ella señala que los comités populares revolucionarios, órganos controlados por los huthis y sus aliados y que administran los asuntos de Yemen, “tienen la legitimidad para gobernar el país”.

La declaración también llama a los comités a reanudar las conversaciones bajo los auspicios de la ONU con la presencia de otras facciones políticas.

Ella también pide a la comunidad internacional que deje de hacer la vista gorda a las atrocidades cometidas por Arabia Saudí y sus aliados contra el inocente pueblo yemení.

Muerte de un oficial saudí

Un grupo de combatientes yemeníes han penetrado por la frontera de Arabia Saudí para entrar en la provincia de Nayran donde tendieron una emboscada a una patrulla militar saudí matando a un alto oficial e hiriendo a varios soldados.

Los combatientes de la tribu Hamedan volvieron luego a sus bases en Yemen a pesar de los intensos bombardeos saudíes.