Los ministros del Interior de los cinco países de la Unión del Magreb Árabe (UMA) adoptaron el jueves en Nouakchott una estrategia contra el terrorismo.
Los ministros del Interior de los cinco países de la Unión del Magreb Árabe (UMA) adoptaron el jueves en Nouakchott una estrategia contra el terrorismo que pasa por el incremento de las medidas contra el reclutamiento takfiri en Internet.
El ministro mauritano del Interior, Mohammed Salem Ould Ahmed Rare, se felicitó por la adopción de “un documento esencial y determinante” al término de la reunión de un día de los cinco ministros de la UMA.
“El Consejo ha pedido que se refuerce la vigilancia sobre las redes de Internet, en particular las redes sociales, que se han convertido en los medios más importantes utilizados por los criminales para atraer a los jóvenes”, indicó un comunicado publicado al final de la reunión.
“Los grupos terroristas utilizan estas redes sociales para engañar a los jóvenes y enviarlos a zonas de conflicto”, precisa el texto que también pide a los estados que “refuercen el control sobre las operaciones de blanqueo de dinero a fin de secar las fuentes de financiación de los terroristas”.
“Los ministros están convencidos de la necesidad de adoptar un enfoque global que tome en consideración todos los aspectos: culturales, religiosos, económicos y sociales con el fin de tratar las causas profundas de los desafíos de seguridad”.
Subrayando “la amplitud de las evoluciones y los grandes acontecimientos que tienen lugar en el Magreb y en su vecindad”, ellos han decidido también “acentuar los intercambios de información y cooperar plenamente para acabar con la plaga del terrorismo”.
El secretario general del Ministerio del Interior de Libia, Omar el Debach, deploró la situación en su país afirmando que “las organizaciones terroristas como Al Qaida y el EI intentan convertir a Libia en una base para sus acciones en la región y el mundo entero en razón de la ausencia del Estado”.
“Estas organizaciones no dan marcha atrás ante nada. No reconocen la democracia ni los derechos humanos. Ellas deben ser combatidas con fuerza con el fin de hacer desaparecer el peligro que ellas representan para el mundo entero”, señalaron los ministros.