Desde el viernes la aviación del reino wahabí empezó a tirar papeles con mensajes en los que pedía la salida urgente del poblado de Saada Vieja, en la provincia de Saada.
Aviones militares de Arabia Saudita continuaron hoy el lanzamiento de octavillas intimidatorias sobre poblados fronterizos de Yemen con advertencia a los residentes de que abandonen sus hogares en previsión de severos bombardeos y posibles acciones terrestres.
Desde el viernes la aviación del reino wahabí empezó a tirar papeles con mensajes en los que pedía la salida urgente del poblado de Saada Vieja, en la provincia de Saada limítrofe con el sur de este país, donde en los últimos días fueron intentos los ataques contra el movimiento insurgente Ansarulá.
El portavoz de la coalición liderada por Riad, general Ahmed Asiri, alegó que el aviso se decidió para proteger la propia seguridad de los vecinos, pero ignoró llamados de fuentes humanitarias en Yemen que consideraron imposible el desplazamiento de personas debido a la precaria situación que viven.
Los bombardeos aéreos iniciados el 26 de marzo dentro de la denominada operación Tormenta Decisiva y los bloqueos marítimo, aéreo y terrestre al empobrecido país han privado a sus habitantes, sobre todo en Saada, de combustible para poder movilizarse en vehículos a zonas seguras.
La escasez de carburante y el carácter indiscriminado de las incursiones aéreas, que han abarcado incluso zonas residenciales y otros objetivos civiles, son las mayores amenazas a la integridad física de los yemenitas, indicaron fuentes de una organización no gubernamental internacional. Además, socorristas desplegados en ese territorio alertaron que, unido a la falta de combustible y de transporte, numerosos vecinos carecen de accesos a información debido a que las redes de telefonía de la provincia quedaron inhabilitadas, por lo que un ataque masivo ocasionaría numerosas muertes.
El reino wahabí centra sus acciones armadas, ahora bajo el nombre dde Restauración de la Esperanza, en Saada por considerarlo junto con Adén uno de los principales bastiones de los insurgentes chiitas yemenitas, que han resistido casi dos meses de ataques diarios.
"Nuestro trabajo ahora es alcanzar a aquellos que planearon esos ataques y están escondidos en Saada, así como en otros lugares donde hay milicias (de Ansar Allah)", señaló Asiri en alusión a los asaltos de días recientes desde territorio yemenita que causaron unos 10 muertos sauditas en Najran.
Durante esta madrugada arreciaron los bombardeos a poblados fronterizos y, según fuentes castrenses citadas por la agencia oficial saudita SPA y en la tumba del fundador de ese movimiento, Hussein al Houthi.
PL