La guarnición del Ejército sirio en el Hospital de Yisr al Shugur continúa resistiendo hallándose ahora en una mejor posición debido al apoyo de la artillería siria.
La guarnición del Ejército sirio en el Hospital de Yisr al Shugur continúa resistiendo hallándose ahora en una mejor posición debido al apoyo de la artillería siria, que se encuentra sólo a dos kilómetros de la instalación. Por su parte, los terroristas de Al Qaida continúan llevando refuerzos a la ciudad.
La guarnición asediada, compuesta por unas 250 personas, civiles y militares, se coordina también con la artillería dándole a ésta coordenadas para que bombardee las concentraciones y posiciones de los terroristas en la ciudad con precisión, en especial en los momentos de ataque de estos últimos, que han lanzado varios coches bomba contra el hospital sin lograr penetrar en él.
Esta coordinación ha sido mucho más efectiva que los ataques aleatorios contra las posiciones de los terroristas, situadas al norte del hospital. Estos últimos han multiplicado sus acciones de ataque contra el hospital por temor a que el Ejército se acerque al mismo.
Sin embargo, todos los ataques han sido repelidos por la artillería siria así como por ataques aéreos y las ametralladoras de los miembros de la guarnición.
El Ejército ha tomado ya una fábrica de azúcar de Kfir, al sur de la ciudad. Los terroristas del Frente al Nusra, que cuentan con misiles Tow antitanque, suministrados por su patrocinadores turco y saudí, tratan de detener la progresión del Ejército hacia el interior de la ciudad.
Por su parte, los militares han continuado su bombardeo de las posiciones de los militantes desde varios ejes.