El Ejército sirio retiró sus líneas defensivas de Ariha después de intensos combates contra bandas terroristas del Frente al-Nusra y perdieron el control de esa provincia en el norte del país.
El Ejército sirio retiró sus líneas defensivas de Ariha, sur de Idleb, después de intensos combates contra bandas terroristas del Frente al-Nusra y perdieron el control de esa provincia en el norte del país.
Ariha, unos 307 kilómetros al noroeste de esta capital, era el último bastión en la provincia de Idleb, cuya ciudad cabecera fue tomada por los extremistas armados desde el pasado 28 de marzo.
Fuentes locales insisten que el avance hacia Idleb se logró después del ingreso de miles de mercenarios de varias nacionalidades a través de la frontera turca, y agrupaciones de antigubernamentales entrenadas en campamentos financiados por el gobierno turco.
Las fuentes añaden que todo el operativo militar contra Idleb es dirigido desde una base de operaciones en territorio turco, bajo el mando de oficiales de los servicios de inteligencia de ese país, Arabia Saudí y especialistas en operaciones especiales de Israel.
El objetivo principal de las bandas armadas, después de la caída de Idleb, es abrir un frente ofensivo que les permita acceder a las provincias de Hama y Latakia, y lograr el control de la costa mediterránea, afirmaron aquí expertos militares.
Hace dos días, Al Manar reveló los planes secretos entre Turquía y Arabia Saudita, para apoyar las operaciones del Frente al-Nusra, brazo armado de Al Qaieda en Siria.
Según el canal Al Manar, ambos gobiernos allanaron el terreno a los grupos terroristas organizados alrededor de lo que llaman Ejército de Al Fatah (ejército de la conquista) para ocupar la provincia de Idleb.
Al Manar destacó que el gobierno saudí suministró armas, dinero, y pagaron el costo de las imágenes de satélite que el centro de mando necesitaba para garantizar la agresión, mientras que Turquía brindó apoyo logístico.
Trascendió además que el gobierno de Ankara suministró a los grupos terroristas el acceso a Internet con una aeronave no tripulada que sobrevuela las zonas de combate y enlaza las computadoras y los teléfonos inteligentes utilizados por los insurgentes.
El plan de agresión a Siria desde Turquía incluye el apoyo de EEUU, cuyos gobiernos llegaron en febrero pasado a un acuerdo para entrenar y equipar en suelo turco a miembros de la llamada "oposición moderada" siria.
Esta semana fueron desclasificados documentos de la Agencia de Inteligencia de Defensa norteamericana (DIA) sobre el apoyo de Washington al grupo terrorista Estado Islámico (EI), en su plan de derrocar al gobierno del presidente Bashar al-Asad, y contener la influencia de Irán en el Oriente Medio.