El gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia han accedido a establecer una comisión de la verdad para investigar los crímenes cometidos durante el medio siglo de conflicto

El gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han accedido a establecer una comisión de la verdad para investigar los crímenes cometidos durante el medio siglo de conflicto en el país.

Ambos lados acordaron que la comisión sea “extrajudicial” y su establecimiento dependerá únicamente del logro de un acuerdo de paz.

Según una declaración conjunta leída al final de las conversaciones de paz celebradas en la capital cubana, La Habana, el jueves, la comisión “no tendrá una naturaleza judicial ni podrá imponer penas a aquellos que aparezcan ante la misma”.

La información que la comisión obtenga no podrá ser utilizada en un tribunal, acordaron el gobierno colombiano y las FARC.

Las partes prometen contribuir decisivamente a “clarificar la verdad sobre todo lo que ha sucedido durante el conflicto, incluyendo las graves violaciones de los derechos humanos y las infracciones de la ley humanitaria internacional”, señaló la declaración.

La comisión tendrá 11 miembros y existirá por un período de tres años. Sus miembros serán escogidos por un comité de siete personas nombradas por las dos partes.

El tema de la justicia para los crímenes cometidos durante la guerra ha sido un punto de conflicto en las negociaciones que comenzaron en La Habana en noviembre de 2012.

Las FARC es el grupo guerrillero más antiguo de América Latina, ya que ha estado luchando contra el gobierno desde 1964.

Las conversaciones de paz han producido hasta ahora sólo acuerdos parciales en varios temas, pero todavía no un acuerdo final que ponga fin a décadas de conflicto entre rebeldes y el gobierno.

Se cree que las FARC tienen unos 8.000 combatientes que operan una gran extensión de las junglas del país.

El conflicto ha producido unos 200.000 muertos y seis millones de desplazados.