La crisis libia requiere una solución política rápida, pues el tiempo apremia, concordaron hoy aquí los cancilleres egipcio italiano y el titular de Asuntos del Magreb argelino.
La crisis libia requiere una solución política rápida, pues el tiempo apremia, concordaron hoy aquí los cancilleres egipcio, Sameh Chukry; italiano, Paolo Gewntiloni, y el titular de Asuntos del Magreb argelino, Abdelkader Messajel.
Los tres titulares estuvieron reunidos casi todo el día aquí para coordinar posturas respecto a la crisis en el país norteafricano, que afecta en directo tanto a El Cairo, como a Argel, y preocupa a los estados del sur de Europa, en especial tras los avances de Estado Islámico (EI) en Libia.
EI, el movimiento que ocupa zonas en Iraq y Siria y tiene ramificaciones en países al norte y el sur del Sahara y en la península Arábiga, controla la ciudad septentrional libia de Bengasi y está implantado en Derna, al este, cercana a la frontera con Egipto.
El canciller egipcio declaró que resulta necesario "establecer un equilibrio entre "el trabajo en el marco político para formar un gobierno de unidad y el apoyo al gabinete y el Ejército legítimos de Libia".
Egipto apoya al gobierno del primer ministro Abdulá al Thinni, refugiado en la ciudad oriental de Tobruk, en contraposición al respaldado por la Hermandad Musulmana, que domina Trípoli, la capital libia.
Ambos son combatidos por EI, cuyos portavoces han amenazado en varias ocasiones con extender sus acciones hasta Europa.
El canciller italiano dijo que el encuentro tripartito de hoy aquí debe ser interpretado como "un mensaje de apoyo a la creación en Libia de un gobierno unificado representativo de todas las facciones".
Aunque en la superficie los enunciados son similares, quedan pocas dudas de que el Gobierno egipcio preferiría ver prevalecer al gabinete de al Thinni, con el cual firmó el año pasado varios acuerdos de cooperación militar.
Esta es la segunda ocasión desde abril pasado que los titulares analizan la crisis libia, cuya génesis está en el derrocamiento del gobierno liderado por Muammar Gadafi por una agresión militar de la OTAN basada en la interpretación sesgada de una resolución del Consejo de Seguridad.
Desde entonces ese rico país petrolero norteafricano, que tenía el Indice de Desarrollo Humano más alto de África, se hundió en un caos al que no se le ve salida a corto plazo.
PL