Al Assad ha señalado que la agresión terrorista y la mentalidad extremista takfiri buscan destruir el tejido de diversidad social y cultural de los países de la región.

El presidente sirio, Bashar al Assad, ha señalado que la agresión terrorista y la mentalidad extremista takfiri buscan destruir el tejido de diversidad social y cultural de los países de la región en general y de Siria en particular.

Durante un encuentro con una delegación del Santo Sínodo de la Iglesia Siriaco-Ortodoxa, Assad afirmó que el pueblo sirio y todos sus componentes han logrado confrontar esta “mentalidad subversiva” mediante la adhesión a su propia historia, cultura y raíces.

“El principal factor para resistir ante este agresivo pensamiento terrorista, que no conoce de nacionalidades o fronteras, es adherirse a los valores morales que todas las religiones divinas sostienen”, dijo el presidente.

Entre estos valores él citó la apertura, la tolerancia y la libertad de creencia. Él subrayó la adhesión de Siria a estos principios, que han sido un factor fundamental en su resistencia.

Por su parte, los miembros del Santo Sínodo subrayaron que Siria ha sido siempre una patria para todos los sirios con dis distintas afiliaciones religiosas y un santuario para todos aquellos que creen en los valores de la diversidad y la tolerancia a pesar de la feroz guerra librada contra el país.

Ellos expresaron su confianza en que el pueblo sirio sea capaz de lograr la victoria y derrotar al terrorismo gracias a la resistencia y sacrificios de su Ejército y la sabiduría y coraje de su liderazgo.

El Patriarca Mor Ignatius II de Antioquía y de Todo Oriente, que es el jefe supremo de la Iglesia Siriaco-Ortodoxa universal, dijo que el hecho de que su iglesia celebre su Sínodo anual en la ciudad siria de Saidnaya este año conlleva un mensaje de apoyo al pueblo sirio en su lucha contra el terrorismo.

Otro mensaje de celebrar la sesión en Siria, señaló, es el de realizar un llamamiento a todos los participantes, que proceden del mundo entero, para que trabajen con el fin de restaurar la paz y seguridad en Siria.

La delegación del Sínodo incluye miembros de la Iglesia Siriaco-Ortodoxa de Siria, Iraq, Turquía, Suecia, Alemania, Holanda, Guatemala, Brasil e India.