Estos enfrentamientos son tales que han llevado a la eliminación del emir del EI en Qalamún, el jordano Abu al Walid al Makdeci.
El EI atraviesa una situación catastrófica en Qalamún, según señaló el diario libanés Al Akhbar. Esta situación se refleja en disensiones internas, arreglos de cuentas, confrontaciones entre sus diferentes grupos y ejecuciones.
El simple uso del teléfono móvil convierte a los miembros del grupo en sospechosos de querer contactar con Hezbolá.
Muerte del emir
Estos enfrentamientos son tales que han llevado a la eliminación del emir del EI en Qalamún, el jordano Abu al Walid al Makdeci, que fue degollado por sus antiguos subordinados.
Makdeci acababa de abandonar las filas del grupo después de haber criticado la corrupción que existe en su seno y las operaciones de pillaje realizadas con la complicidad de los comandantes del grupo. Él llamó al EI “banda de piratas y saqueadores”.
En una grabación sonora en Internet, Makdeci reprochó al EI su negativa a establecer un tribunal religioso en la región o efectuar sesiones religiosas para todos aquellos que se unen a sus filas.
Según él, los miembros del EI en la zona pertenecen a grupos y bandas rivales que se odian entre sí y se matan entre ellos.
Según Al Akhbar, tras la llegada de Makdeci a Qalamún en octubre de 2014, él logró aumentar las filas del EI atrayendo sobre todo a milicianos del Ejército Sirio Libre, de tal modo que el grupo pasó de 96 milicianos a más de 800. Él fue también responsable de la decisión de liquidar a dos dirigentes locales del EI en febrero pasado.
Sin embargo, de la noche del lunes al martes, Makdeci fue ejecutado después de que los militantes del EI tomaran su vivienda al asalto en la localidad libanesa de Arsal y lo degollaran sin pasar ni siquiera un juicio en uno de sus “tribunales religiosos”. Su mujer, su hijo y otras tres personas fueron también abatidos junto con él.
Otro emir militar del grupo, Abu Balkis el Iraqi, ha muerto también al igual que Talhaat amir (Abu Bakr Amir), un antiguo jefe de milicia del Frente al Nusra que se pasó a las filas del EI. Ambos murieron en choques internos y no por un obús de Hezbolá, como algunos medios habían afirmado.
La muerte de Makdeci fue firmada por su sucesor, el iraquí Mohammed Abdel Rahim Helli al Dulaimi, hermano de Suya al Dulaimi, la ex esposa del líder del EI, Abu Bakr al Bagdadi, detenida en el Líbano. Otro emir, Muaffak Abu Sus, originario de Al Qussair, comanda ahora el ala más poderosa del EI en Qalamún e intenta también imponerse a sus rivales.