La comparación de las actividades de construcción chinas en las islas del Mar de la China Meridional con las de Rusia en Ucrania da fe de una tendencia peligrosa en la política exterior estadounidense

La reciente comparación de las actividades de construcción chinas en las islas del Mar de la China Meridional con las de Rusia en Ucrania da fe de una tendencia peligrosa en la política exterior estadounidense.

El paralelismo que Washington intenta establecer entre Rusia y China indica que EEUU apuesta de forma deliberada por una escalada de las tensiones en el mundo, señala la publicación económica alemana Deutsche Wirtschafts Nachrichten (DWN).

“El hecho de que EEUU establezca una comparación con Ucrania podría significar que Washington busca una escalada en esta situación. Aquí cabe citar también los intentos estadounidense de imponer sanciones contra China. EEUU espera que esto ayudará a reforzar a sus aliados en Asia”, escribió DWN.

El pasado fin de semana, el secretario adjunto de EEUU, Antony Blinken, hizo saber que las reivindicaciones territoriales de China eran comparables a las medidas adoptadas por Rusia en el este de Ucrania y que Pekín estaba “poniendo en peligro la paz y la estabilidad mundial”.

Según Antony Blinken, China expande su influencia al crear islas artificiales en el Mar de la China Meridional y aumentar también sus propias aguas territoriales, algo que Filipinas, Japón y otros aliados de EEUU ven como algo ilegal. EEUU acusa a China de querer “modificar el estatus quo” adoptando medidas unilaterales como es el caso también, según Washington, de Rusia en el este de Ucrania.

Sin embargo, los intentos de EEUU de aprobar sanciones contra China podrían tener un efecto boomerang, como ha sucedido en el caso de Rusia. Los países europeos sufren las sanciones contra Rusia mientras que este país las soporta sin pérdidas considerables, indicó el periódico. Por otro lado, el reforzamiento de la cooperación chino-rusa llevará al hundimiento a la hegemonía política y económica estadounidense.