La Lista Iraquí ha intentado todo durante años para construir una alianza estratégica con EEUU, pero la retirada estadounidense de Iraq deja tras de sí un riesgo de confrontación.
Tres funcionarios de alto nivel de la Lista Iraquí (Al Qaima al Iraqiya), liderada por Iyad Allawi, han pedido a EEUU que intervenga en los asuntos políticos de Iraq para formar un nuevo gobierno y hacer frente a las políticas del primer ministro, Nuri al Maliki, informó el canal por satélite iraní Al Alam.
En una carta publicada por el diario New York Times y dirigida a la Casa Blanca, el jefe de la Lista Iraquí, Iyad Allawi, el presidente del Parlamento, Osama al Nayifi, y el ministro de Finanzas, Rafie al Issawi, acusan a Maliki de “trabajar de manera contraria a los intereses de EEUU, país que ha sacrificado a sus soldados en Iraq”.
La carta señala que “la Lista Iraquí ha intentado todo durante años para construir una alianza estratégica con EEUU, pero la retirada estadounidense de Iraq deja tras de sí un riesgo de confrontación”.
Los firmantes de la carta advirtierten de “un retorno a la guerra civil en Iraq a menos que Washington intervenga directamente”.
Según Al Alam, esta carta tan extraña coincide con un acuerdo entre Osama al Nayifi, signatario de la carta, y el presidente iraquí, Yalal Talabani, para resolver el caso de Tariq Hashemi de acuerdo con la ley iraquí, que garantiza una investigación correcta de los hechos.
Por su parte, el jefe de Inteligencia saudí, Muqrin bin Abdul Aziz, pidió a su departamento que prepare un plan para asesinar al vicepresidente iraquí, Tareq al Hashemi, dijo el canal de televisión Al Alam, que citó fuentes saudíes.
Del mismo modo, según el sitio Awamiya, la petición de Muqrin bin Abdul Aziz procede directamente del rey saudí y su príncipe heredero. Se informó que “el Rey Abdulá expresó su temor a que Hashemi, como resultado de presión política y judicial, revelara los secretos de la cooperación de Arabia Saudita con Al-Qaida”.
Según el sitio, Hashemi se ha convertido en un objetivo y una carta que debe ser quemada. El sitio agrega que “es un momento oportuno para su asesinato porque el primer acusado de este crimen sería el primer gobierno encabezado por Maliki, lo que puede llevar a un conflicto sectario o disturbios en las regiones de mayoría sunní”.
Por su parte, el vicepresidente del bloque de la Alianza Parlamentaria del Kurdistán iraquí, Mohsen Saadoun, dijo que “el Kurdistán no está involucrado en el caso al Hashemi” y subrayó la necesidad de “aplicar en este caso la justicia iraquí, que requiere la separación de poderes”.